miércoles, 13 de noviembre de 2013

DULCES SUEÑOS



- Ni rebozado, ni al pil-pil -argumentó Matías-, como mejor sabe es en pepitoria, al chilindrón o cochifrito.

- Puedes hacerlo como quieras pero, por favor, cochifrito no, que me produce acidez.

- Pues a la cerveza. Nunca has probado un pollo a la cerveza como el que yo preparo.


         Terminaron de dar cuenta del par de tomates revenidos, de los restos de pizza y de unos plátanos marrones que componían la cena y, echándose un cartón encima y a modo de buenas noches, Emilio dijo: ¡Qué festín nos vamos a dar el día que encontremos un pollo en el contenedor!, ¿eh, Matías?

6 comentarios:

  1. Me ha gustado tu manera de reflejar una cruda realidad edulcorada con ese toque de humor. Dicen que la esperanza es lo último que se pierde, y creo que el humor ayuda mucho a que así sea. Saludos.

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    1. Así es, Juana, y los sueños son gratis ¿por qué no recurrir a ellos?.
      Gracias por comentar.
      Un saludo.

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  2. Es triste que todavía estas cosas sucedan. Buen retrato de la realidad de muchos.

    Saludos.

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    1. Gracias Beto. Bienvenido a este potaje, sírvete lo que quieras.

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  3. Que buen micro, y emulando a lo que cuentas en la reseña de tu perfil, has demostrado que el tamaño no importa.
    Un saludo

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    1. Gracias Asun y bienvenida. Efectivamente, el tamaño no importa y cada semana uno... por lo menos.
      Un beso.

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